Resumen

Un asegurador en salud preocupado por el alto costo de los exámenes de laboratorio solicitados a los pacientes y los medicamentos formulados, decide tomar la decisión que crear estímulos económicos para los médicos que menor número de exámenes soliciten a los pacientes y los que se destaquen por el menor valor total de los medicamentos formulados en cada trimestre del año.

El Gerente de la aseguradora y el Director de un Hospital donde atienden muchos de sus pacientes, se reúnen con todos los médicos vinculados laboralmente a la institución prestadora y después de plantearles la preocupación por el costo creciente de la atención de salud de los pacientes y su impacto en la sostenibilidad futura de la aseguradora e indirectamente del sistema de salud, les comunica la decisión que han tomado de incentivar la utilización racional de exámenes de laboratorio y medicamentos. Les explica que trimestralmente se publicará el ranquin de los médicos de acuerdo con estos dos ítems y a los que queden en los primeros lugares de menor utilización les darán un estímulo económico.

Los médicos en general están de acuerdo con la decisión con excepción de un pequeño grupo que se opone por considerar que esta decisión afectará negativamente la calidad de atención médica e implicará una violación de la ética que debe regir la relación médico – paciente – institución de salud.  Al no tener eco su reclamo a la institución y aseguradora, ni apoyo de muchos de sus colegas, deciden consultar a un Comité de Ética Médica al respecto.